La FEEJ recomienda a los jardineros que porten encima un documento que especifique qué servicio concreto van a realizar.
Vía GUÍA VERDE: La Federación Española de Empresas de Jardinería (FEEJ) defiende la necesidad de poder llevar acabo aquellas tareas esenciales o de urgencia que requieran los espacios públicos o privados durante el estado de alarma. La entidad ha lanzado una campaña para recoger firmas solicitando que se consideren “actividades esenciales” las tareas básicas de mantenimiento de jardines.
Según explica a GuíaVerde el presidente de la federación, Jaume Alagarda, se encuentran ante una situación de “indefinición” por parte de norma que solo permite los “servicios esenciales”, y que apunta que cada administración local está interpretando de una forma diferente. Ante esta situación, y recordando que “nuestras empresas y sus trabajadores han de seguir las directrices oficiales”, desde la FEEJ defienden que sus profesionales deben poder llevar a cabo trabajos “imprescindibles”, como las reparación de averías o de sistemas electrónicos, de riego, abatimientos de árboles o podas urgentes, así como lucha contra plagas como la del picudo rojo. También recuerdan que es necesario poder mantener aquellas plantaciones recién realizadas.
Desde la FEEJ recuerdan que “en la última publicación del BOE de 30 de marzo deja claro que la jardinería no es una actividad esencial pero que sí que puede haber servicios mínimos imprescindibles y de urgencia”. Por ello, recomienda a aquellos profesionales de la jardinería que deban acudir a realizar este tipo de trabajos que con el modelo de autorización de desplazamiento porten un documento en el que se especifique las tareas mínimas que se van a realizar, el lugar, la hoja de pedido y copia del contrato o similar.
“No son créditos lo que necesitamos”
La federación además explica que “las Pymes y los autónomos configuran más del 90 % del sector de las empresas de servicios, carecemos de la capacidad financiera de las grandes empresas que siempre tienen detrás a grandes corporaciones financieras. Dependemos directamente de nuestro trabajo y nuestra actividad y la sociedad depende en gran medida de ello, de nuestra labor profesional y de nuestros impuestos que financian servicios públicos y prestaciones sociales”. Por ello destacan que están “soportando una presión increíble por cese de actividad y por las dificultades de ejercer el servicio. No son créditos ni aplazamientos lo que necesitamos, no podemos endeudarnos más. Queremos que se tenga en cuenta a la hora de volver a la ‘normalidad’ mediante un trato justo frente la contratación de servicios y a la aplicación de normativas que buscan el más barato aunque sea el menos especializado”.
Asimismo, destacan el valor que puede tener el mantenimiento mínimo de los jardines para la ciudadanía, en su estado de ánimo, que señalan se puede ver empeorado al ver una ciudad degradada. También reclaman “respeto a nuestros trabajadores que circulan por las calles realizando servicios mínimos y para resolver situaciones y solucionar problemas que afectan a los ciudadanos en sus hogares o en sus instalaciones de trabajo”, en referencia a aquellos vecinos que recriminan a algunos profesionales que estén desplazándose por vías públicas.