Los árboles urbanos son patrimonio vegetal de incalculable valor y debemos protegerlos: aportan beneficios ecosistémicos y salud para los ciudadanos.
Inma Gascón estará el 22 de Abril en El Jardín de la Concepción de Málaga para hablarnos de la importancia del árbol en las ciudades.
Debemos conocer el incalculable valor del patrimonio vegetal de las ciudades, protegerlo y gestionarlo de acuerdo con los conocimientos científico técnicos actuales y contar con expertos y profesionales y no con tradiciones erróneas obsoletas para su gestión.
“Una ciudad se puede juzgar por la forma en que trata a sus árboles”
Ya no hay escusas. El árbol es el elemento clave conformador del paisaje Urbano y su gestión indica el grado de cultura de una ciudad. El valor “económico” del arbolado se puede calcular y los políticos y gestores están obligados a preservar este patrimonio. Se emplean grandes recursos económicos en realizar trabajos en arbolado que no solo dañan y merman la salud del árbol sino que suponen un gasto enorme para la economía pública: No tiene sentido.
“La salud es lo primero”
Si importante es la economía, más aún es la salud. Los beneficios ecosistémicos del árbol urbano y su acción en la mitigación del cambio climático es clara.
- Absorben CO2 y otras sustancias perjudiciales
- Aumentan la biodiversidad.
- Proporcionan sombra y bajan las temperaturas.
- Retienen las aguas y evitan catástrofes naturales.
- Aumentan el valor de las viviendas y atraen el turismo.
- Mejoran la salud física y mental de las personas.
Casi el 70 % de la población vive en ciudades y debemos conservar y, más aún, aumentar el patrimonio vegetal de las ciudades para mejorar la calidad de vida.
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